"Viaje inverso" es la crónica subjetiva a lo largo de una geografía espiritual y social. El protagonista se narra a sí mismo en permanente viaje material y anímico en pos de una quimera, en la vecindad o en la inclusión dentro de una realidad social absorbente y como un ojo extraño que lo contempla desde más allá. Es una realidad fraccionaria y desarticulada, por retazos ajenos al rigor cronológico, cuyos elementos, sin embargo, se integran efectivamente en una totalidad final, a la manera de la fusión de acontecer, recuerdo y sueño que es la cotidianidad. Aluvión que rompe el orden histórico, pero que a fin de cuentas representa la suma y resta del tiempo.