Luego de vivir unos años en Miami, y tras la separación de su pareja, Andrés decide regresar a su Caracas natal. Apasionado por la navegación desde su infancia, sube a un velero con la intención de recorrer el Caribe. Con muy poca experiencia como marinero, y acompañado por libros, discos y recuerdos, emprende un viaje con rumbo al sur que lo llevará a conocer los placeres de las Antillas. Pero rápidamente descubre que su travesía lo arrastra hacia aguas más profundas. Solitario en su embarcación, Andrés experimenta un viaje interno que una ola tras otra, lo irá transformando hasta el punto de mudar la piel en el mar y en el alma. Su destino final, claramente definido en la brújula al soltar amarras, se irá desviando paulatinamente por el magnetismo del amor. Una novela que se mueve al ritmo de los elementos como un velero que avanza con buena brisa. Un libro que a ratos es bitácora, diario íntimo, crónica de viaje y relato psicológico. Una invitación a sentir el poder del mar con el corazón abierto.