"Premio de Cuentos Concurso Literario 1998 Contraloría General de la República".

Este libro de cuentos tiene un título muy sugestivo e inquietante: “Fábulas urbanas” y probablemente el autor quiso con ello unir el universo mágico de la fabulación, (que viene de fabulare: hablar, contar) con el mundo real y brusco de la ciudad, de la urbe, que es el lugar donde la gente se queda sobreviviendo y acezante después de deambular por el campo, la provincia y los sueños infantiles. Querales retrata la urbe a través del paisaje humano, de los seres que la viven huérfanos de naturaleza, pero también la mira con los ojos de Homero y de Jorge Luis Borges, que en ocasiones hacen suyos y los utiliza como gafas oscuras para deletrear el infinito y reconstruir las odiseas cotidianas.