A medida que se interna en la psicología de un caudillo real, Uslar Pietri construye la historia novelada de una nación sometida a los oscuros designios de un hombre a quien el poder ha transmutado en un ser sobrenatural que todo lo ve y todo lo puede. A diferencia de otras de su género, esta novela no busca caricaturizar ni satanizar al Caudillo que gobierna “un país de piedra” imponiendo un orden “tan personal, tan hecho su imagen y semejanza, tan vinculado a su carácter, a su vida, a su presencia física”. Por el contrario el autor profundiza en los personajes, las circunstancias y las intrigas en virtud de las cuales surge y se consolida un orden tan cerrado que logra congelar el tiempo y detener la Historia.