Bibliografía: p. [115]-116.

El tema del presente ensayo es desusado, más difícil de situar y susceptible de provocar interpretaciones que tal vez no correspondan a nuestra intención. Con el fin de evitarlas sobre todo haremos algunas aclaraciones que tal vez contribuyan también a precisar la dirección de este trabajo. Su tema es una exploración por un territorio poco frecuentado, pero que forma como el substrato viviente de muchas obras literarias, aunque puede también no pasar a expresión; y por tratarse una exploración, al rato segura, a ratos titubeante, resulta casi imposible definirla. Lo que exploramos es la posibilidad que tiene el ser humano de establecer una relación directa, no basada en la ideación, con los seres y las cosas; pero lo hacemos a través de testimonios tomados de la literatura, especialmente la inglesa. El ensayo consta de tres secciones. La primera esboza el tema a través de una carta de Keats; la segunda comenta experiencias, textos e ideas de otros autores a fin de que el tema vaya perfilándose, corporificándose y ahondándose más, indirectamente; y la tercera rehúye la recapitulación para, en cambio, extenderlo hacia problemas vecinos, y abocar a donde quiere, a lo que pudiera considerarse como nuestro objetivo y que hemos representado con la figura de la elipse: ciertas obras literarias se nutren de una experiencia inicial, primigenia, básica y el lector ha de recorrer el camino en sentido contrario, desde ellas a la experiencia, de manera que siempre desemboca en la vida, realizándose así un trayecto revelador.